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La Maruca
Nos vamos de viaje a la costa cántabra sin salir de Madrid. Y es que entrar en La Maruca supone transportarnos a Santander nada más cruzar la puerta. ¿Y que no puede faltar en un restaurante cántabro? Pues efectivamente una buenas anchoas del cantábrico, que La Maruca acompaña con unos ricos pimientos asados. Antes de pasar a los platos fuertes, te recomendamos que pruebes su ensalada de tomate y bonito del norte o también podéis pedir como entrante para compartir sus famosas rabas de Santander. Para los amantes de la carnes, una de las especialidades del restaurante su su cordero al horno deshuesado con patatas panadera. De la carta de postres nos llaman la atención dos de sus propuestas: su tarta al limón y su cremosa tarta de queso de Cañadio.
